Un seguro de vida es un respaldo económico para tus dependientes en caso de que llegaras a fallecer de forma prematura, o sufrir una invalidez que te impida seguir trabajando. Estos son los puntos básicos que debes de conocer.

Para algunos, adquirir un seguro de vida es un lujo.

Argumentan que son caros y que es más sensato usar el dinero en gastos presentes que destinarlo a un futuro incierto.

Eso sería verdad solo si fuéramos invulnerables ante los riesgos que todos los seres humanos corremos: enfermedades graves, accidentes, invalidez y fallecimiento.

¿O puedes afirmar que tú estás exento?

Piensa en tus hijos. Si un accidente llega a impedir que sigas trabajando, ¿quién se encargará de su sustento? ¿Qué tendrías que hacer para conseguir el ingreso necesario?

Sin duda, eso resultará más costoso que invertir en un seguro de vida, el cual te brinda un respaldo que protege a tu familia ante imprevistos de este tipo.

Para que tengas mayor claridad al respecto, respondemos a continuación, las 5 preguntas más importantes sobre los seguros de vida.

5 puntos básicos sobre los seguros de vida

1. ¿Qué es un seguro de vida?

Un seguro de vida es una protección financiera para aquellas personas que dependen de los ingresos del asegurado.

Es una póliza que compromete a una compañía aseguradora o institución bancaria a dar una suma de dinero a dichos beneficiarios en caso de que el contratante se enferme de gravedad, sufra un accidente que le incapacite o, en el peor de los casos, fallezca.

2. ¿Cómo funciona un seguro de vida?

El monto asegurado se establece según el tipo de póliza que el asegurado elija, el cual se difiere en cierta cantidad de primas, las cuales son los pagos a cubrir durante el periodo de tiempo establecido.

El contratante deberá estar al corriente con las primas para que la aseguradora brinde dicha suma a los beneficiarios cuando se llegue el momento.

Factores como el trabajo que tienes y la zona en que vives, determinan el nivel de riesgo al que estás expuesto, y por lo tanto, el costo de la póliza.

Por ello, es importante que conozcas y compares las opciones que existen para que elijas el seguro que más te convenga, con base en tus necesidades y situación económica.

Solo si retiras tus fondos antes de cumplir 65 años, deberás pagar el porcentaje de impuestos respectivo.

Si un accidente llega a impedir que sigas trabajando, ¿quién se encargará del sustento de tu familia? ¿Qué tendrías que hacer para conseguir el ingreso necesario?
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3. ¿Por cuánto dinero debes contratar tu seguro de vida?

La mayoría de los seguros se pueden ajustar a tu presupuesto.

Para que tengas una idea más precisa del monto que necesitas, te recomendamos hacer una estimación de tus gastos mensuales (renta, alimentación, transporte, servicios, etc.). La recomendación es que la suma asegurada cubra por lo menos 5 años de manutención de tu familia.

Toma en cuenta que, entre mayor sea la cantidad asegurada, mayor será el monto de las primas.

4. ¿Cómo se puede cobrar el seguro?

Es muy importante que el beneficiario esté al tanto de que tienes un seguro de vida, para que pueda cobrarlo en el momento que lo requiera. De no ser así, tendrá hasta 5 años para hacerlo.

La documentación mínima que debe presentarse en estos casos es:

– identificación oficial,
– acta(s) de nacimiento del(los) beneficiarios,
– acta de nacimiento del asegurado,
– acta de matrimonio (si es el cónyuge),
– original de la póliza o certificado de seguro,
– certificado médico de defunción,
– acta de fallecimiento certificada
– certificado del Ministerio Público en caso de muerte accidental
– contrato de la póliza con los nombres del fallecido y los beneficiarios.

En caso de invalidez total y permanente o alguna otra cobertura del seguro, el plazo será únicamente de dos años, y eres tú como asegurado quien deberá cobrar la suma.

5. ¿Qué tipos de seguros de vida existen?

a) Seguro de vida temporal

Este seguro te cubre en caso de muerte durante la vigencia del contrato, y lo puedes contratar hasta los 65 años. Usualmente, no tiene plazos forzosos y el precio de las primas es fijo durante todo el tiempo vigente.

Además, es posible agregar cobertura como muerte accidental o invalidez o parcial. En algunos casos, puedes recibir un anticipo por enfermedad o gastos funerarios.

b) Seguro de vida permanente

Bajo este esquema, el monto pactado en el contrato se paga inmediatamente después de la muerte del asegurado. No obstante, suele ser más costoso y las primas son de por vida.

Conclusiones

Un seguro de vida es una excelente herramienta para tener solvencia económica ante los siniestros que pueden poner en riesgo la estabilidad de tu familia.

Si realmente te preocupas por su bienestar y deseas asegurar su sustento a futuro, lo mejor es que comiences a invertir en ello desde ahora.

Investiga el plan que más se adecue a tu presupuesto y conviértete en parte de ese mínimo de personas que se preparan y aseguran la tranquilidad de los suyos.

Para más información al respecto, te invitamos a descargar nuestra guía practica para la contratación de un seguro de vida.

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